La posibilidad, cada vez más cercana, de una subida de los tipos de interés en la zona euro no preocupa demasiado a la banca. El sector considera que un ascenso moderado del precio del dinero será absorbido sin muchas dificultades por los clientes de créditos hipotecarios. Las entidades se concentran en el diseño de productos que faciliten las condiciones de pagos.

"No somos ajenos a esa posibilidad la subida de tipos, pero trabajamos en alargar los plazos de pago de 35 a 40 años", explica Ramon Gras, director de mercados y productos del Banco Sabadell. Apunta que la banca tradicional se esfuerza en ampliar las facilidades de pago de las hipotecas, aunque eso no signifique pagar menos, sino rebajar la cuota, "por lo menos durante algún tiempo", agrega.

BAJO ENDEUDAMIENTO En general, el sector parte del hecho de que, pese a las continuas recomendaciones del Banco de España sobre el crédito, el endeudamiento familiar es "perfectamente asumible", según Jordi Gual, director de estudios de La Caixa. Recuerda que sólo en el 7,5% de las familias endeudadas el crédito hipotecario representa más del 40% de la renta disponible. Lo que supone que el número de hipotecas que podrían resentirse por una subida de los tipos de interés es "relativamente bajo", destaca Gual.

Los expertos consideran que el factor que puede distorsionar un aterrizaje suave ante una posible subida de los tipos es el aumento del desempleo. Pero "muy mal debería ir la economía para que el desempleo se convierta en un factor clave", reconoce Gras.

Frente a los matices del discurso de la banca convencional, las entidades de internet son más contundentes: "Todavía nos queda mucho recorrido para que una subida de los tipos de interés nos afecte", afirma Otón Gómez, director de márketing de ING Direct. Las condiciones de los créditos hipotecarios de estas entidades son muy competitivas. El tipo de interés y la cláusula de revisión suelen ser más bajas que las hipotecas de la banca de oficinas. Algunas entidades on line han suprimido las comisiones. Pero la estructura de costes y la de riesgos les facilitan un mullido colchón ante el aumento del precio del dinero.

La banca tradicional admite que el precio de las hipotecas suele ser mejor en internet. Pero también saben que el cliente no puede negociar. "Las condiciones son mejores, pero si quieres por ejemplo un 100% del crédito, te encuentras con dificultades para obtenerlo", señala Salvador García, responsable de márketing de Caixa Manresa, quien agrega que en la banca de oficinas se suele pagar más, pero el producto "se viste mejor".

ALGUNOS EJEMPLOS El producto hipotecario más agresivo lo ofrece el Santander, con una hipoteca en la que durante los cinco primeros años sólo se pagan intereses. La cuota mensual es bastante reducida durante ese periodo, y el sexto año, cuando comienza a amortizarse el capital, la cuota sube exponencialmente. El plazo es de 40 años.

La Hipoteca fácil del BBVA tiende a facilitar los pagos del crédito en la primera parte del mismo: el 20% del capital se amortiza al vencimiento. Por ello, los pagos a vencimiento se elevan, entre otras cosas porque crecen los intereses totales a satisfacer.

Además, Algunas entidades prefieren el incremento progresivo de las cuotas. Es el caso de Caixa Manresa, que opta por hacer que la cuota crezca un 0,75% anualmente. "Ese alza es asumible por parte de los tenedores de la hipoteca. Sobre todo si son jóvenes", dice Salvador García, responsable de márketing.

La mayoría de las entidades intentan que la hipoteca suponga el anclaje del cliente en sus relaciones financieras. Por este motivo, algunos bancos, como Banesto, ofrecen créditos "bonificados", en los que se paga más o menos, según los productos que haya contratado el cliente.