El Banco de Japón (BOJ) decidió no variar los tipos de interés y calificó de "floja" la situación de la economía japonesa. Es el segundo mes consecutivo en el que la entidad financiera rebaja su previsión de crecimiento para Japón. Según la entidad, "el crecimiento económico ha sido flojo a causa de la situación general de los altos precios de la energía y las materias primas, además de la debilidad de las exportaciones". El BOJ considera que uno de los mayores riesgos es la ralentización económica en EEUU, uno de los principales destinos de las exportaciones japonesas.