Con tan sólo tres meses en el cargo, el presidente del Banco Popular, Angel Ron, hizo ayer su primera presentación de resultados anuales sin los hermanos Luis y Javier Valls Taberner en la sala. El tercer banco español ganó 800 millones de euros, con un crecimiento del 12,1% y gracias al "espectacular" crecimiento del negocio no hipotecario, pero "sin abandonar" las hipotecas.

En créditos no hipotecarios, Popular creció un 20,1%. El conjunto de la banca creció un 8,6%. Y todo porque el banco supo adelantarse. Ron recordó que las expectativas para el negocio hipotecario son importantes, pero que la tasa de viviendas iniciadas no será tan elevada.

El nuevo presidente del banco dio algún pellizco a la competencia, sobretodo en las comisiones. Reconoció que ellos mismos rectificaron tras la reacción de los clientes ante el intento de cobro de comisiones por el uso de cajeros del banco fuera del horario de oficinas. Pero el Popular practica el "traje a medida" con las comisiones a sus clientes, mientras otros "cobran tarifa plana (Banesto) o no cobran".

Pese a estas alusiones a sus colegas, Ron estuvo solidario y prudente para con los presidentes de los dos primeros bancos, Santander (Emilio Botín) y BBVA (Francisco González), que atraviesan momentos difíciles. Dejó claro que no quería cometer ingerencias, pero ante la insistencia de los periodistas, aseguró que lo deseable es "preservar la estabilidad del sistema financiero, que es fundamental para la estabilidad del país".

Felicitó al BBVA por sus "magníficos" resultados; dejó claro que ambos bancos, desde el punto de vista del negocio, no tienen ningún problema, para añadir que "lo mejor para el sistema es que esos asuntos se cierren cuanto antes". Aseguró que no tiene "estrategia" para aprovechar el desgaste de sus rivales.

Reafirmó la vocación de independencia del banco y negó que pueda ser comprado a corto o medio plazo, porque "tenemos un núcleo duro estable de accionistas", con un 30% del capital.

RETRIBUCION MILLONARIA El Popular pagó el año pasado 2,57 millones de euros a sus presidentes, Javier Valls y Angel Ron, así como al presidente del consejo Luis Valls, según datos del Informe Anual de Gobierno Corporativo enviado a la CNMV. Los tres son los únicos consejeros del Popular retribuidos, ya que esta entidad sólo paga a los que tienen dedicación exclusiva.