A medida que avanza la crisis, Bankinter se diferencia más del resto del sistema financiero por la resistencia de sus resultados. La entidad ganó 138,67 millones de euros en el primer semestre, el 4,73% más que hace un año. Podría parecer un avance modesto, pero las previsiones apuntan a que las ganancias de la mayoría del sector cayeron entre el 5% y el 30%.

Además, la morosidad de la entidad sigue siendo la más baja y cada vez se distancia más de la media. Al cierre de junio, solo el 2,02% de su cartera de créditos estaba en situación de impago, cuando en mayo la media del sistema estaba ya en el 4,64%. Sus provisiones cubren el 90,45% de sus préstamos de dudoso cobro, frente al 57,6% del conjunto de entidades.

Los resultados de Bankinter podrían haber sido mayores, pero ha destinado 57 millones a provisiones genéricas. El consejero delegado, Jaime Echegoyen, señaló que la entidad quiere crecer de forma autónoma.