El grupo químico y farmacéutico alemán Bayer ha acelerado los 15.000 despidos previstos en el plan de reestructuración diseñado hasta el 2005. En el 2002, el gigante de la aspirina despidió a más de 3.600 empleados, unos 600 más de los que se había planificado, con lo que la plantilla se situó en 122.600.

El recorte de personal y las desinversiones contribuyeron a ahorrar 250 millones de euros (41.596 millones de pesetas), según explicó ayer el presidente, Werner Wenning, en la sede de la multinacional en Leverkusen.

Un total de 5.400 despidos se producirán en Alemania, mientras que el resto se llevarán a cabo en otros países que, por ahora, no incluyen a España ni Portugal.