Las bolsas europeas comenzaron la jornada con subidas, pero el impulso se diluyó poco a poco. El Ibex 35 bajó el 0,2%, hasta los 10.040 puntos. El mercado estadounidense abrió también al alza, a la espera de las palabras del presidente de la Reserva Federal (Fed) de EEUU, Ben Bernanke, sobre la posibilidad de nuevos estímulos para el crédito, además de dar a conocer su visión sobre la situación de la economía: "La recuperación es inusualmente incierta", dijo, lo que provocó un retroceso en el mercado neoyorquino. Las bolsas europeas ya habían cerrado con ligeras subidas, salvo la española, que echó la persiana con un descenso moderado.

Los inversores permanecen a la expectativa de las pruebas de resistencia de la banca europea. El veredicto sobre la solvencia de las entidades financieras no se darán a conocer hasta el próximo viernes, con las bolsas cerradas.

El banco de inversión japonés Nomura pronosticó ayer que las pruebas crearán dos bloques en Europa. Los bancos del norte del continente tienen una situación más saludable que los bancos del sur. Al mismo tiempo, adelanta que se incrementarán las divergencias de cotización entre las entidades de ambos bloques. Pero el mercado prefiere esperar a tener los resultados reales antes que dar crédito a pronósticos más o menos fundados.

Con todo, las mayores pérdidas de la sesión, aunque contenidas, fueron para los bancos. El Santander perdió el 1,33% y el BBVA, el 0,77%. Igualmente, la banca mediana, desde el Popular hasta Bankinter cedió en torno al punto porcentual. Por su parte, Iberdrola, que anunció un descenso del beneficio del 2% en el semestre, restó el 0,06%, mucho menos que Iberdrola Renovables, que presentó ayer sus resultados, y cuyas acciones cayeron el 1,77%. Mientras, en el mercado continuo, La Seda de Barcelona retrocedió ayer el 7,53%.

En el mercado de divisas, el euro se intercambiaba al cierre de las bolsas a 1,282 dólares.