Las bolsas aceptan que las medidas de estímulo anunciadas este fin de semana por el presidente electo de EEUU, Barak Obama, pueden mejorar la situación económica.

Además del plan de inversiones en infraestructuras, expuso su intención de ayudar al maltrecho sector del automóvil norteamericano, lo que puede interpretarse con más bajadas de tipos de interés y nuevos planes fiscales para impulsar la actividad.

Con esa interpretación, Wall Street ya se movió al alza el viernes, cuando todas las bolsas europeas digirieron con pesimismo los malos datos de empleo en EEUU, y gana más del 6% en dos días.

"Aparecieron los cazadores de gangas, los que aprovechan los precios bajos y la posibilidad de un cambio de tendencia para tomar posiciones", según explicó Mariano Sancho, director de renta variable de Riva y García.

El Ibex 35 español no se salió de la tendencia y subió el 6,4%, hasta los 9.036 puntos, impulsado por los grandes valores, principalmente por los primeros bancos.

El índice español se valió del poco volumen de contratación en una jornada alcista.