El primer ministro británico, el laborista Gordon Brown, prevé plantear el próximo sábado a sus colegas internacionales, en el transcurso de la cumbre del G-20 en Washington, la puesta en marcha de una acción coordinada de rebajas fiscales para mitigar el impacto de la crisis financiera. Así lo anunció ayer en la habitual rueda de prensa mensual en su residencia oficial.

Brown evitó confirmar una bajada de impuestos en el proyecto de presupuestos de 2009 que en breve presentará su ministro de Hacienda, Alistair Darling, pero no lo desmintió y dijo que lo planteará al resto de líderes en una reunión de la que también espera un nuevo acuerdo de comercio que evite el proteccionismo y, al menos, el boceto de la reforma del sistema financiero.