El primer ministro británico, Gordon Brown, advirtió hoy en Brasil que es necesario inyectar un "mínimo" de 100.000 millones de dólares al sistema financiero internacional para impulsar el comercio exterior, medida que consideró fundamental para salir de la crisis.

"Por primera vez, concretamos el volumen de recursos necesario para asegurar que las empresas puedan exportar, 100.000 millones de dólares", explicó Brown, en una rueda de prensa posterior a su encuentro con el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.

Brown afirmó que la caída de comercio es el "más reciente" efecto adverso de la crisis e incidió en que las exportaciones van a caer en todo el mundo por primera vez en 30 años, por lo que animó a tomar medidas urgentes como ésta en la próxima cumbre del G-20 en Londres para estimular el intercambio de bienes y servicios.

"El G-20 tiene que dar un paso al frente para tomar medidas que reviertan la falta de crédito que ha secado al comercio mundial", afirmó Brown. El ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, dijo que esta propuesta se venía perfilando desde hace tiempo, pero que hoy Brown la precisó.

Aseguró que Brasil está "totalmente de acuerdo" y "dispuesto a colaborar", aunque matizó que "hay que madurar" la idea y "afinar los términos", para asegurar que la inyección de recursos "no afecte" a las reservas internacionales de Brasil.

Además de esta medida, el mandatario británico recalcó que se debe prevenir el proteccionismo y "dar nombre" a los países que incumplan sus acuerdos comerciales, para que sean vigilados por los mecanismos de supervisión de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Brown aseguró que en la cumbre del G-20, el 2 de abril, se va a acordar la retomada de las negociaciones de la Ronda de Doha de la OMC, que supondrá un impulso al comercio mundial.

El líder británico también consideró que el Consenso de Washington "ha muerto" y exhortó a "construir" uno nuevo, a partir de la reforma del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial (BM), para que tengan "más transparencia, apertura y credibilidad".

Consideró que es esencial reforzar el control sobre las instituciones financieras, bancos y paraísos fiscales, y que se avance en la divulgación de datos y en la transparencia. Además, dijo que se debe "asegurar" que haya recursos para apoyar a los países que no tengan dinero para aplicar planes de rescate a sus propios sistemas financieros. Lula coincidió en la necesidad de retomar la Ronda de Doha y enfrentarse al proteccionismo y se mostró "optimista" ante la reunión del G-20 de Londres, sobre la que dijo que "hay condiciones" de alcanzar un acuerdo.