Los precios agrarios seguirán encareciéndose y "se estabilizarán a un nivel más elevado durante los próximos 10 años", según un análisis de la Comisión Europea. El comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, reconoció ante el Parlamento Europeo que "los precios de los productos alimenticios no volverán a sus niveles de antaño y que su volatilidad aumentará". "La era de los alimentos a bajo precio se ha acabado", sentenció. Desde el 2000, los precios del trigo en dólares se han triplicado y los precios del arroz y del maíz se han doblado, explicó Michel a los eurodiputados. Desde principios del 2008, los precios aún han sufrido un nuevo aumento del 20%, añadió. Dentro de la UE, los precios subieron de septiembre del 2006 a septiembre del 2007 más del 80% para el trigo y la leche en polvo, del 50% para maíz y mantequilla, y del 30% para la carne de ave.

El consumo mundial de cereales previsto para el 2007-2008 (1.669 millones de toneladas) será superior a la producción mundial en al menos 14 millones de toneladas, en un momento en que las reservas mundiales se han recortado a la mitad (107 millones de toneladas). Las reservas de la UE también han quedado en mínimos (500.000 toneladas), mientras que en el 2006 eran 14 millones de toneladas. Las malas condiciones climáticas provocaron una pérdida de producción en la UE de 15 millones de toneladas en el 2007 y unas caídas de la cosecha en los grandes exportadores del 50% en Australia y del 20% en Canadá.

El impacto del cambio climático ha acentuado una tendencia al alza fomentada por el incremento de la demanda mundial (aumento de la población y del consumo en las economías emergentes), la reducción de las reservas a su nivel más bajo en 30 años, la especulación financiera que ha vinculado la cotización de las materias primas alimenticias a la cotización del petróleo, y la dedicación a la fabricación de biocarburantes de más del 20% de la producción de maíz de EEUU.

AYUDA EXTRAORDINARIA Para intentar mitigar el impacto de la crisis en los países más pobres, Michel anunció un incremento extraordinario de la ayuda alimentaria de la UE en 117 millones de euros, que sumado a las partidas ya aprobadas elevará la ayuda este año a 283 millones. Pero Michel advirtió de que solo podrá evitarse una crisis alimentaria mundial si se logra aumentar globalmente la producción, en especial en Africa, pero que cualquier medida "tardará 24 meses en dar resultados".