La Comisión Europea ha recordado que cualquier inyección de capital público a una caja de ahorros que necesite recapitalizarse deberá contar con la autorización previa comunitaria y tendrá que ir acompañada de un plan de reestructuración de la entidad afectada.

El Ejecutivo comunitario ha considerado "positivo" el anuncio hecho por el Gobierno español para acelerar la recapitalización de las cajas de ahorro y ha señalado que contribuirá a "reforzar la confianza en el sector financiero español".

No obstante, la Comisión Europea ha avisado que toda aportación del Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (FROB) a cualquier entidad requerirá su aprobación para garantizar que no se producen distorsiones significativas en la competencia en el sector.

"Si hay recapitalizaciones, deberán ser compatibles con las reglas que tenemos en vigor. Los beneficiarios tendrán que presentar un plan de reestructuración que asegure su viabilidad", han indicado la portavoz del comisario de Competencia, Joaquín Almunia.

El Ejecutivo comunitario prorrogó antes de concluir el 2010 la vigencia del sistema especial de ayudas a las entidades financieras hasta finales de diciembre del 2011, pero endureció sus condiciones. Ahora toda ayuda pública necesita la aprobación previa de la Comisión Europea y debe ir acompañada de un plan de ajuste interno de la entidad.