La Comisión Europea multó ayer con 478 millones de euros (80.000 millones de pesetas) a cuatro cementeras de Reino Unido, Alemania, Francia y Bélgica por organizar un cartel de larga duración en el mercado de las placas de yeso.
La francesa Lafarge deberá pagar 249,6 millones de euros, aunque recurrirá la sanción. El resto de la multa se divide entre la británica BPB (138,6 millones), la alemana Gebruder Kannuf (85,8) y la belga Gyproc Benelux (4,32). Tanto Lafarge como BPB ya fueron sancionadas en 1994.
"El considerable importe de la multa refleja el tamaño del mercado, el impacto del acuerdo ilegal sobre el consumidor y el comportamiento reincidente", explicó el comisario Mario Monti. También se multó con 2,85 millones de euros a las farmacéuticas Aventir Pharma y Rhone Poulenc por concertar precios del compuesto metylglucamina.
