Apenas unos días después de que se desatase una oleada de falsos correos electrónicos contra diferentes entidades financieras españolas, el Cuerpo Nacional de Policía ha detenido en Barcelona a 17 miembros de una compleja organización, con los capos establecidos en Rusia, que practicaban una estafa electrónica mediante el sistema conocido como phishing .

Los investigadores han calculado que la banda desvió a cuentas de Moldavia más de 165.000 euros por este sistema. Comisiones Obreras de Cataluña (CONC) está entre los perjudicados por la actividad delictiva del grupo. Entre los detenidos como presuntos autores hay un empleado temporal de La Caixa de 22 años, que fue despedido de la entidad.

Esta banda se había especializado en suplantar la identidad de importantes entidades financieras. Captaban los datos mediante páginas falsas a las que se accedía por vínculos desde correos electrónicos enviados de forma masiva. Otras veces, la organización introducía en el ordenador de las víctimas programas troyanos que capturaban y reenviaban hasta los cerebros de la organización las claves bancarias robadas.

DENUNCIA POLICIAL CCOO de Cataluña denunció a la policía que alguien realizó 20 transferencias bancarias no autorizadas desde una cuenta de la organización sindical. De allí se habían evaporado 66.133 euros de su saldo. La entidad bancaria acabó restituyendo el dinero.

Una de las particularidades de esta organización era el sistema que utilizaba para captar a las personas que se encargaban de blanquear después los fondos obtenidos fraudulentamente. De forma análoga a lo que sucede con el tráfico de estupefacientes, en internet también se identifica como mulero a quien se encarga de transportar de forma digital a cuentas del extranjero el dinero conseguido mediante fraude.

La banda captaba a sus muleros internautas mediante mensajes engañosos con falsas ofertas de empleo. Por ejemplo, la inexistente casa de compra y venta de antigüedades y joyas, Tolli´s Art & Antique Ltd, ofrecía ingresos de entre 2.000 y 3.000 euros por un sencillo trabajo desde el ordenador de casa.

El nuevo empleado debía encargarse de recibir en su cuenta el pago de antigüedades de clientes españoles y reenviar ese dinero a un número de cuenta, ubicada en Moldavia. A cambio de la transferencia, el nuevo trabajador se llevaría una comisión.

ACTIVIDAD FRENETICA No todos los muleros eran conscientes de trabajar blanqueando dinero destinado a una organización criminal. Por este motivo, los responsables policiales insistieron ayer en desconfiar de los anuncios de trabajo a través de Internet. La actividad de esta banda era tan frenética que los investigadores aseguran que cada semana creaban nuevas empresas ficticias con engañosas ofertas de trabajo.

Los miembros de la organización, ahora detenidos, dieron un paso más para captar a esos blanqueadores de dinero. Sin escrúpulos, ofrecieron trabajo en favor de organizaciones de defensa de niños o de protección de animales. Los interesados debían recibir en su cuenta corriente el dinero de los donantes de estas oenegés, y reenviar los ingresos a unas cuentas también en Moldavia. En su publicidad insistían en que, además de recibir una buena retribución, se ayudaba a las onegés.