El desplome sin precedentes del consumo privado fue la principal causa de que la economía española se hundiera el 3% en el primer trimestre del 2009, el mayor retroceso del producto interior bruto (PIB) desde los 70, lo que ha llevado a una caída del empleo del 6% y a la destrucción de 1.140.000 puestos equivalentes a tiempo completo en un ejercicio.

Así lo certificó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), que publicó unos datos de Contabilidad Nacional Trimestral algo peor de lo avanzado hace una semana por el propio organismo y de lo que había anticipado el Banco de España a finales de abril. En ambas ocasiones se apuntó una caída del 2,9% del PIB porque se contaba con una caída mucho menor del gasto privado (y un deterioro mayor de la inversión). En Europa, han sido mayores las caídas de Alemania (6,9%), Italia (5,9%), Reino Unido (4,9%), Holanda (4,5%) y Francia (3,2%). Pero en ningún caso ha habido la destrucción de empleo que sufre España.

Según el INE, el gasto privado se desplomó el 4,1% respecto al mismo periodo del 2008, la mayor caída conocida en esta serie del INE, que empieza en los años 80. En los peores momentos de la crisis de 1993, el consumo privado llegó a caer el 2,6%. Además, el primer trimestre del 2009 aportó otra rareza: el consumo en alimentación retrocedió por primera vez en la serie estadística (entre el 0,6% y el 1%).

El INE vincula el retroceso del consumo a la caída del empleo asalariado, que no ha podido ser del todo compensado por unos menores tipos de interés, las rebajas en algunos precios (sobre todo, carburantes) y los incentivos fiscales del Gobierno.

Además, la inversión en bienes de equipo agudizó su recesión en el primer trimestre, con una caída del 18,6%, superior, incluso, a la de la construcción (del 12,4%). Las exportaciones sorprendieron con un retroceso del 19% y el gasto turístico de los extranjeros bajó el 18,7%.

Todos los sectores productivos (salvo los servicios no sometidos a la competencia) están ya en números negativos. La industria, donde el desplome llega al 11%, ha desplazado a la construcción (-8%) como peor sector. Los servicios de mercado apuntan tasas negativas por primera vez (aquí está el comercio de vehículos y de carburantes, por ejemplo).

INDICIOS POSITIVOS En su primera comparecencia ante los medios de comunicación, el nuevo secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, consideró que la caída del PIB "puede haber llegado ya a su punto más álgido" en el primer trimestre y confió en que en el segundo la evolución económica no sea "tan negativa", si bien reclamó "prudencia y cautela". La vicepresidenta económica, Elena Salgado, se refirió, ante la Comisión de Economía del Congreso, a "indicios" sobre el posible detenimiento en el deterioro de la economía. "Empezamos a ver la luz al final del túnel, y en esta ocasión, no es un tren que viene en sentido contrario", dijo.

El portavoz económico del PP, Cristóbal Montoro, destacó que la luz al final del túnel que ve el Gobierno "no es la de un tren, sino la del camión que viene conducido por Zapatero, con su intervencionismo". Desde CiU, Josep Sánchez Llibre insistió en que el Gobierno no realiza un diagnóstico real de la situación "dramática" de la economía. Y el portavoz del PNV, Pedro Azpiazu, criticó el "optimismo desmedido" del Gobierno.