CaixaBank ha colocado 1.500 millones de euros en cédulas hipotecarias con vencimiento a 10 años en la primera emisión institucional del año de una empresa española. La demanda ha superado los 2.400 millones de euros y el cupón se ha fijado en el 1,25%, 60 puntos básicos sobre el 'midswap', el índice de referencia para esta clase de emisiones.

La entidad presidida por Jordi Gual ha destacado que la operación "permite extender el perfil de vencimientos" del banco y "refuerza los activos líquidos de alta calidad de CaixaBank que, a 30 de septiembre alcanzaban los 52.553 millones de euros, con un Liquidity Coverage Ratio (ratio de cobertura de liquidez) del 174%, muy por encima del mínimo requerido del 80% para 2017".

CaixaBank ha querido aprovechar "buenas condiciones del mercado para realizar esta emisión", que a su juicio "demuestra la confianza y la puesta en valor de las fortalezas de la entidad por parte de los inversores, así como de la calidad crediticia que respalda este tipo de emisiones". En el 2016, el banco ya realizó una emisión de cédulas hipotecarias por 1.500 millones de euros a siete años, con una demanda superior a los 2.500 millones de euros.

La emisión, que contará con la calificación de Aa2, A+ y AAH por parte de las agencias Moody's, Standard & Poor's y DBRS, respectivamente, ha obtenido más de un centenar de órdenes de inversores institucionales, especialmente internacionales. Los bancos colocadores han sido Barclays, BNP Paribas, CaixaBank, Crédit Agricole y UniCredit.