El consejo de Caja Madrid decidió ayer esperar y seguir "puntualmente" los acontecimientos sobre la nueva oferta de Enel y Acciona, optando por no tomar una decisión sobre su participación del 9,93% de Endesa y la oferta hispano-italiana. El presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, realizó un esfuerzo por justificar el pacto de E.ON con sus rivales, Enel y Acciona, dejando en la cuneta a Caja Madrid.

La caja había optado por firmar un acuerdo con E.ON y acudir a su oferta, a 40 euros, cuando ya estaba anunciada una "hipotética" de Enel, a 41 euros. Según explicaba una nota de la caja madrileña, Blesa recordó con los consejeros las circunstancias en que se había tomado esa decisión ante "el riesgo" de que la eléctrica germana abandonara la operación, cuando "era la única presentada formalmente" ante la CNMV y garantizaba los derechos de los accionistas minoritarios de Endesa. Blesa recordó que el pacto entre Enel y Acciona abre la posibilidad de dividir Endesa pasados tres años y que la eléctrica española acabe en manos italianas.

Endesa, la eléctrica que preside Manuel Pizarro, ni confirmó ni desmintió que esté dispuesta a llevar el acuerdo tripartito entre Enel, Acciona y E.ON ante la Audiencia Nacional. Hoy se conocerán las intenciones del equipo de Pizarro.