El presidente de Caja Rural de Extremadura, Mariano Señorón Rubio, presentó ayer en Mérida la convocatoria del IV Premio Espiga Mundo Rural, un galardón con el que se pretende fomentar la creación y el desarrollo de proyectos e iniciativas que contribuyan a la conservación del entorno rural en la comunidad autónoma.

Señorón Rubio --que estuvo acompañado por el consejero de Desarrollo Rural, Francisco Javier López Iniesta, y por María Isabel García, representante de la entidad ganadora de la última edición, la Asociación por la Formación y el Empleo de Mujeres en el Ambito Rural de Logrosán-- explicó que el objetivo de la entidad es reconocer el trabajo realizado en campos como la creación de empleo estable, la explotación de recursos económicos sostenibles, el mantenimiento del patrimonio histórico, la conservación del medio ambiente o la creación de nuevas empresas. "Iniciativas que, en definitiva, buscan mejorar la calidad de vida de los habitantes del mundo rural", reseñó.

El presidente de la entidad financiera también subrayó que este galardón pretende contribuir a la resolución de problemas como la baja densidad demográfica de los municipios pequeños y pidió una apuesta decidida por los núcleos rurales, ya que "es una forma de garantizar su futuro, muy importante desde el punto de vista social, económico y medioambiental".

Esta cuarta edición del Premio Espiga Mundo Rural está destinado a las personas, empresas, entidades e iniciativas que persiguen la promoción y conservación del mundo rural en Extremadura dentro de los municipios de menos de 10.000 habitantes. El plazo de presentación de las solicitudes finalizará el próximo 30 de marzo y la resolución del certamen se conocerá dos meses después. La iniciativa o proyecto ganador recibirá 6.000 euros en metálico.