Los máximos accionistas de Telepizza, los hermanos Pedro y Fernando Ballvé, anunciaron ayer que estudian lanzar una oferta pública de adquisición (OPA) sobre el 100% de la firma de comida rápida. Los hermanos Ballvé son propietarios de Campofrío, la primera marca española de alimentación y, a través de su sociedad de inversiones Carbal, son titulares de alrededor del 24% de Telepizza. Pedro Ballvé es presidente de Campofrío y también lo es de Telepizza.

Carbal está dispuesta a pagar un precio "tentativo" de 2,15 euros por acción, lo que supone una prima del 14% sobre el precio de cierre del pasado viernes y del 25% sobre la media de los 12 últimos meses. A este precio, comprar el 75% del capital costaría unos 427 millones, "que se pagarán en metálico", según fuentes de la sociedad. A ese precio, el 100% equivale a 570 millones de euros (95.000 millones de pesetas).

En el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Ballvé explica que la oferta de compra está condicionada "al resultado satisfactorio de las negociaciones con potenciales coinversores y con los bancos financiadores, y a la obtención de las aprobaciones oportunas". Según fuentes de la compañía, estas negociaciones están casi ultimadas.

Tras el anuncio de la operación, la CNMV suspendió la cotización de Telepizza. A las 10 de la mañana, cuando volvió al parqué, la firma subió el 12,23% (2,11 euros por acción). Al final, Telepizza cerró con un alza del 11,70%, hasta los 2,10 euros.

A pesar de no cotizar en el Ibex 35, sino en el mercado continuo, el impulso de Telepizza contribuyó a que la bolsa española lograra ayer su nivel máximo en 5 años, por encima del nivel de los 11.500 puntos. Otras operaciones en marcha, como la OPA de Gas Natural sobre Endesa, también contribuyeron. Los rumores de una contraopa de la alemana RWE sobre Endesa impulsaron la cotización de la eléctrica un 2%.

Los Ballvé controlan el consejo de Telepizza con el apoyo de los hermanos José Carlos y Aldo Olcese (vicepresidente ejecutivo y consejero respectivamente), de Telefónica (casi el 5% del capital, a través de Atento) y de Caja Madrid (casi el 1%).

"CRECIMIENTO PARADO" El presidente de Telepizza, Pedro Ballvé, en declaraciones a Bolsacinco, justificó la OPA porque "el crecimiento de la compañía está parado y porque el pequeño tamaño de la compañía la hace ser poco eficiente para cotizar en bolsa". La intención que subyace tras la OPA es excluir de la cotización en bolsa a la compañía, fundada en 1988. Fuentes del consejo de Telepizza explicaron ayer que existe voluntad de "continuidad" y que el objetivo es "disfrutar" de los resultados de una compañía que ha sido objeto de "una reconversión dura".

Algunos analistas ven en la OPA, sin embargo, el primer paso de una operación que incluye el saneamiento de la compañía y su venta posterior.