La compañía de distribución francesa Carrefour registró en el primer semestre del año pérdidas por valor de 58 millones de euros, frente a los beneficios de 744 millones de euros que consiguió en el mismo periodo del ejercicio precedente. El grupo achaca los números rojos a la incidencia sobre el consumo de la crisis económica mundial y a los recortes de precios que ha realizado sobre sus productos.