La tesis de CCOO es que "los sistemas complementarios de pensiones deben seguir siendo fomentados" y que "su función es la de complementar un sistema público suficiente, de modo que sirva para alcanzar una tasa de sustitución próxima al último salario, y como instrumento de ahorro a largo plazo", según defendió su secretario general, Ignacio Fernández Toxo. No obstante, el líder sindical abogó ayer por "no generar más alarma", dado que el futuro de las pensiones "está garantizado". Para Toni Ferrer (UGT), "el sistema público de pensiones está suficientemente saneado para que no haya que recurrir a planes de pensiones privados".