La patronal CEOE ya tiene listas sus reivindicaciones para el diálogo social cuando se inicie a partir del 15 de mayo. Los empresarios no están en contra de la mayoría de las propuestas para aumentar la estabilidad en el empleo lanzadas por los sindicatos o el Gobierno pero, a cambio, le exigirán la rebaja generalizada de cuotas sociales, la reformulación de los convenios colectivos y una nueva ley de huelga.

El presidente de la CEOE, José María Cuevas, sostiene que muchas empresas le reclaman que fuerce medidas para abaratar el despido. El líder de la patronal incluyó esta exigencia en las peticiones que recientemente trasladó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Cuevas admite que la rebaja de las indemnizaciones por despido es una batalla difícil de ganar tras el cambio político y, por eso, dirigirá su estrategia del diálogo social hacia otros objetivos más inmediatos. Pero sí que insistirá en la necesidad de un cambio normativo que rebaje la "excesiva judicialización" de los procesos de despido.

TEMPORALIDAD Respecto al objetivo de lograr mayor estabilidad laboral, el presidente de la CEOE está tranquilo porque sabe que el ministro de Trabajo, Jesús Caldera, no es partidario de encarecer los contratos temporales como pretenden los sindicatos. La patronal se encargará de explicar que el contrato temporal ya tiene una regulación "exhaustiva", está gravado con indemnización por despido y cotiza al Seguro más que un indefinido.

La única forma de acercar los costes de los trabajadores fijos a los temporales es bajar las cuotas de los contratos indefinidos, como apuntó el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez.

Al líder de los empresarios le gustaría terminar este mandato en la CEOE en primavera del 2006 con un gran logro para la patronal: la rebaja de las cotizaciones sociales. En este punto es donde presentará batalla. Esgrimirá un estudio del Banco de España que afirma que basta bajar cinco puntos las cuotas para subir un 8% el empleo estable.

La patronal argumentará que de cada 100 antiguas pesetas que ingresa el Estado por cuotas, 83 son de la patronal y que "este impuesto sobre el empleo" encarece un 39% los salarios. El problema es que Cuevas quiere llevar la rebaja de cuotas a todos los contratos o, al menos a todos los indefinidos, y Trabajo aspira a que afecte sólo a los contratos estables firmados tras el pacto.

UGT y CCOO aseguraron ayer, en respuesta al anuncio de José Luis Rodríguez Zapatero, el sábado en Valencia, de que en otoño estará en marcha un gran pacto social por el empleo, que lo importante no es marcarse un plazo, sino pactar contenidos útiles y que refuercen la cohesión en materia social.

REACCIONES Respecto al anuncio de Zapatero, el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, dijo a Efe que es "lógico" que el Gobierno se ponga fechas en función de su programa electoral, pero advirtió de que, para su sindicato, el "ritmo" lo va a marcar la "voluntad de las partes de ir concretando soluciones precisas".

El secretario de Acción Sindical de UGT, Antonio Ferrer, indicó que lo "deseable" es que el pacto entre Gobierno, patronal y sindicatos se firme cuanto antes y que sea "útil", pero recordó que hasta después de las elecciones del 13 de junio el Gobierno no iniciará la negociación.