El ambiente de crispación no cesa en el sector tabaquero. Recién calmados los ánimos tras el proceso de reforma de la organización común de mercado (OCM), el ambiente ha vuelto a caldearse en las negociaciones productores-industrias sobre el precio de la materia prima en la campaña 2004. Cetarsa, empresa pública y principal operador, ha ofrecido a las agrupaciones de productores con las que viene contratando pagar por kilo de tabaco un 35% menos que la campaña pasada, lo que ha generado gran malestar en el sector.

En el caso del tabaco virginia, el de mayor contratación, Cetarsa ofrece (véase gráfico) 60 céntimos de euro por kilo, 35 menos que el año pasado, según ha comunicado por carta la compañía tabaquera a los directivos de cooperativas. "El sector industrial, encabezado por la empresa pública Cetarsa, hace un planteamiento unilateral e injustificado de bajar el precio en torno a un 35%", explicó ayer Ignacio Huertas, secretario regional de la organización UPA-UCE.

EL 50% DEL MERCADO Huertas compareció junto al también dirigente del sindicato José Cruz y a los presidentes de Tabares e Ibertabaco, Angel Miguel Rubio e Higinio Burcio, dos de las agrupaciones de productores más importantes. Según éstos, Cetarsa, que compra el 50% del tabaco de España, se va a ahorrar más de 12 millones de euros (2.000 millones de pesetas) con esta rebaja de precios. Cetarsa compra en torno a 20 millones de kilos.

Los productores se temen que las otras tres transformadoras --WWTE, Taes y Agroexpansión-- se alineen en precios con Cetarsa y la bajada sea generalizada. Huertas dijo que el sector está "muy defraudado" y "abandonado a su suerte" después de haber luchado contra reforma. El acuerdo de precios tiene que estar cerrado antes del 30 de junio. De lo contrario, los tabaqueros perderán las ayudas comunitarias, que representan el 85% de sus ingresos cada campaña.

Por su parte, Rubio dijo: "Nos sentimos abandonados, no sólo por las empresas sino también por los políticos que prometieron aclarar el futuro del sector". El argumento esgrimido por la industria para bajar precios es la mala situación del mercado internacional y la existencia de tabaco sin vender de campañas anteriores, algo que los productores niegan con rotundidad.

"Esta oferta está condenando a la desaparición al cultivo del tabaco", manifestó José Cruz, quien añadió que el precio ofrecido por Cetarsa es tres veces menor del coste de producción por kilo. Cruz dijo que no descartan convocar movilizaciones.