El presidente de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), Pedro Meroño, admitió ayer que "algo está fallando" en el sistema eléctrico español, pero precisó que es "impensable" que se produzcan apagones generalizados como los ocurridos el año pasado en Estados Unidos o Italia. En una entrevista en TVE, recogida por Efe, Meroño explicó que los apagones de los últimos días en Madrid, Barcelona, Sevilla, Huelva y Badajoz, responden a causas distintas y negó que las deficiencias en el suministro estén relacionadas con el proceso de liberalización del sector.

El presidente del organismo regulador recordó que, desde este año, los consumidores tienen derecho a que se descuenten de la factura eléctrica los cortes de suministro. En su opinión, mientras haya apagones como los registrados en los últimos días, "tenemos que seguir planteándonos que hay que tomar las medidas correspondientes".

Meroño explicó que "en general" los cortes de suministro se deben a problemas en las redes de distribución, que pueden responder a múltiples causas, entre ellas falta de inversiones en mantenimiento y desarrollo.

No obstante, precisó que no se puede afirmar que la red de distribución esté obsoleta, puesto que existen diferencias entre las Comunidades Autónomas.

MAS INVERSION El presidente de la CNE aseguró que la calidad del suministro "ha mejorado mucho" en los últimos años gracias a las inversiones en las líneas de transporte y distribución, aunque se mostró convencido de que no ha sido suficientes, y admitió que el organismo regulador no dispone de un "diagnóstico real" sobre la situación de las redes.

El presidente de la CNE subrayó que el posible déficit retributivo de la actividad de distribución "no exime" a las compañías de su responsabilidad de garantizar el servicio y defendió que las eléctricas deben invertir "ante todo en calidad y en España". Meroño recordó que la CNE ha elaborado una propuesta sobre la nueva metodología retributiva que se ha remitido al Ministerio de Industria.

En el capítulo de generación eléctrica, apuntó que hoy por hoy son "impensables" apagones generalizados como los ocurridos en 2003 en Estados Unidos o Italia, ya que el sistema español tiene ahora un margen de reserva de entre el 10% y el 15%. Meroño admitió que la situación era "realmente preocupante" hace dos años, cuando el margen oscilaba entre el 0% y el 5%.