La Comisión Nacional del Mercado de Valores anunció ayer que no ha encontrado rastro del supuesto grupo de inversores mexicanos que, parapetado tras la sociedad Blueprime, había anunciado su intención de hacerse con el Banco Popular y había alcanzado un acuerdo con Trinitario Casanova para hacerse con su participación en el banco (que llegó a estar en el 3,5%).

En una actuación poco habitual, el organismo hizo público un comunicado en el que afirma que, con toda la información recabada en las últimas semanas, "no resulta acreditada la existencia de un inversor o grupo de inversores" interesado en el tercer banco español.

Además, los requerimientos hecho por el organismo a Blueprime pusieron en evidencia tanto la ausencia de financiación como del "asesoramiento necesario" para ejecutar la operación.

La CNMV advierte de que analizará si las conductas de los distintos sujetos implicados en este caso podrían dar lugar a responsabilidades administrativas y penales de los implicados o no.