La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) investiga la venta de la sociedad FG Valores, creada por el presidente del BBVA, Francisco González, al banco de inversiones estadounidense Merrill Lynch en 1996. La Comisión sospecha, además, que ha desaparecido documentación sobre este asunto, o ha sido borrada de sus archivos, y pudo ser obra de un directivo de la CNMV.

En una nota de cuatro puntos difundida ayer, el regulador señala que, a instancias de una llamada de la cadena SER, el lunes 17 un periodista de la emisora se entrevistó con el presidente de la Comisión, Manuel Conthe, al que entregó tres cartas. Se abrió una comprobación sobre las presuntas irregularidades recogidas en las misivas, las tres escritas por el que en 1996 era presidente de Merrill Lynch en España, Claudio Aguirre. Tras "las indagaciones preliminares" no había constancia en el registro de la Comisión ni de "las cartas de Merrill Lynch ni de otros documentos e informaciones" que aclaren el alcance de las "eventuales" irregularidades.

HECHOS PRESCRITOS Del análisis de la documentación entregada, si los hechos e infracciones denunciados fueran ciertos, "estarían prescritos", según el regulador, puesto que han pasado más de cinco años. Aunque la CNMV "sigue investigaciones" sobre los hechos, por si existiese algún indicio de delitos penales no prescritos y cita como ejemplo, un "posible encubrimiento de eventuales infracciones de FG Valores, sus directivos o administradores". La Comisión investiga dentro y fuera de sus despachos, y si encontrara "indicios" informaría al fiscal.

La SER también desveló ayer que el 23 de julio de 1996, Francisco González, su abogado, Juan Fernández-Armesto --luego presidente de la CNMV-- y un funcionario de la CNMV, "recibieron a los representantes de Merrill Lynch en el despacho de FG Valores. Por entonces, González había sido ya nombrado presidente de Argentaria.

En el entorno de González se insistía ayer en que "no hubo irregularidades" en la compraventa y que la operación se cerró en las condiciones pactadas inicialmente (según esas fuentes, 11.800 millones de pesetas, no 2.000 como sostienen los compradores), tras el proceso de due diligence de Merrill Lynch.

En cuanto a los cambios en el proceso de venta, según fuentes próximas a González, "se acordó por ambas partes" modificar la estructura inicial de la operación, y en vez de una compraventa de la sociedad se optó por una compraventa de activos. Además, insisten en que se informó a la CNMV de todas las actuaciones y no ha habido "daños económicos o perjuicios" para nadie. González tiene "plena confianza" en la actuación de la citada comisión.

Merril Lynch detectó un "desfase contable" de 800 millones de pesetas en FG Valores antes de cerrar su compra. Un directivo de la sociedad se responsabilizó y la empresa restituyó el patrimonio.

El BBVA dará a conocer sus resultados anuales el día 26, y mantiene la convocatoria del consejo de administración para el martes previo.