La visita a un taller de coches suele ser excesiva para el cliente y una tabla de salvación para los concesionarios. La crisis ha hecho que las reparaciones y, en especial la venta de recambios, hayan aportado a las empresas dos tercios de sus ganancias. La defensa de ese filón ha puesto al gremio en pie de guerra contra el proyecto de la Comisión Europea de liberalizar los servicios de posventa de automóviles.

El proyecto de Bruselas permitirá a los propietarios de vehículos llevar su coche a un taller independiente si la reparación no está cubierta por la garantía, manteniendo los derechos frente a la marca, y utilizar recambios de calidad similar a los originales con la misma validez. La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos (Ganvam) ha procurado aprovechar el nombramiento de Joaquín Almunia como nuevo comisario Competencia para intentar frenar o introducir cambios en el reglamento impulsado por la anterior titular, Neelie Kroes.

"ACTIVIDADES INSEPARABLES" "La venta y la reparación de coches son actividades que van unidas, y no se pueden separar", avisa Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de Ganvam.

Los recambios suponen solo el 18% de la facturación de un concesionario pero, por contra, aportan el 44% de sus ganancias, debido a que es la parte del negocio con mayor margen comercial. Fuentes del sector apuntan a que los concesionarios pueden cargar hasta un 30% al precio de algunos repuestos.