En opinión del presidente del BBVA, Francisco González, el objetivo del sistema financiero español en estos momentos es consolidar el sistema financiero de forma que, por una parte, se limite su sobrecapacidad y, por otra, se evite que pervivan entidades zombies, las que son "inviables" y se "mantienen artificialmente".

Aunque resulta difícil calcular cuánto durará la segunda fase de la recesión --debilidad bancaria y fuerte aumento de la morosidad--, González dijo que antes tendrán que aflorar todas las pérdidas bancarias, que en Europa "serán voluminosas".