El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, pidió ayer al PP que no exponga "generalidades" sobre la reforma laboral y que concrete sus propuestas para determinar cuál es su modelo, "porque hasta la fecha" no se conoce. Durante su intervención en el Congreso ante la Comisión Mixta de la UE para hacer balance de la presidencia española, Corbacho recriminó al PP que solo diga que quiere una reforma laboral que sea buena para España, algo que desean todos los españoles.

El ministro de Trabajo señaló que en el futuro se harán las reformas "que sean menester", si bien matizó que estas deberán venir no solo del mercado laboral, sino también del cambio de modelo productivo. En este sentido, recordó que en el periodo de 1980 al 2007, "en el que España sufrió una gran transformación", la tasa media de paro fue del 16%, "una cifra muy elevada y que hay corregir con un modelo de economía diferente".

Por su parte, el diputado del PP José Ignacio Echániz criticó que el Gobierno se haya puesto "medallas" y la "satisfacción" del ministro por haber calificado su actuación de "notable" cuando la actuación de España se merece en su opinión un "aprobado bajo" porque no ha superado los datos del empleo.

El diputado popular recordó que cuando gobernó el PP bajó la tasa de paro del 23% al 9% y las dos veces que ha gobernado el PSOE lo ha dejado por encima del 20%, y añadió: "Esperemos que en el debate de la reforma laboral seamos capaces de alcanzar acuerdos interesantes". Corbacho replicó que cuando gobernaba el PP la causa de la evolución favorable de la economía se debió al empuje que dio a "la economía del ladrillo", que generó mucho empleo, pero que hoy la alta tasa de paro se debe a ese modelo "que debemos cambiar", zanjó.

Sobre la predisposición del PP de alcanzar acuerdos en las reformas, dijo que sería deseable, aunque se mostró "escéptico".