Jornada de corto recorrido en los mercados y no únicamente en los de renta variable sino también en los de materias primas, ya que el precio del crudo se tomó un respiro tras encadenar sucesivos máximos en los últimos días. La reunión del Banco Central Europeo (BCE) fue la referencia macroeconómica más importante del día, pero pasó sin pena ni gloria en los mercados europeos ante lo repetitivo que resultó el discurso del responsable de la política monetaria de la UE. Las presiones inflacionistas obligan a mantener los tipos en el nivel actual. De hecho, el mercado ya había descontado la previsible resolución del consejo de gobierno del banco central.

Ante este panorama, las bolsas europeas registraron movimientos erráticos durante toda la jornada en la que predominó el signo negativo. Pero las ganancias registradas por Wall Street, gracias a las ventas minoristas, lograron que el Ibex desandara el camino de las pérdidas para acabar con un ascenso del 0,34%, hasta los 14.074 puntos. Otros mercados europeos no corrieron igual suerte y terminaron con ligeros descensos.

Los dos grandes bancos realizaron un esprint final para conseguir ganancias, del 0,43% para el Santander y del 0,33% para el BBVA. Telefónica, que conseguía anotarse una mejora del 0,79%, fue el valor que más aportó al ascenso final del índice.

Las constructoras tuvieron una evolución similar a los dos grandes de la banca y, en un día en el que negociaron a la baja la mayor parte de la sesión, cerraron en positivo con ganancias del 0,81% para ACS y del 0,17% para FCC.

Aunque si hubo un sector con mayor protagonismo, fue el de las tecnológicas. Los títulos de Técnicas Reunidas, Gamesa y Abengoa subieron el 2,15%, el 2,84% y el 5,06%, respectivamente.

Las firmas de energías renovables sufrieron los mayores recortes: fuerte caída para la filial de Iberdrola, que perdió el 3,42%. Fuera del selectivo, Solaria se dejó el 3,24%.