El Gobierno tiene intención de incluir los costes de algunas medidas de la reforma laboral, como podrían ser las ayudas a la contratación indefinida, en los presupuestos del 2006, haya o no acuerdo entre los agentes sociales. En septiembre, valorará los avances obtenidos en el diálogo social y "fijará prioridades" para entresacar aquellos temas que no puedan esperar a un acuerdo. "Habrá que tomar decisiones y gobernar", aseguran en el Ministerio de Trabajo.