Las familias españolas se gastarán en Navidades una media de 655 euros, un 10,8% menos que en el 2009, que fue de 735, el gasto más bajo desde el 2005, lo que deja al descubierto el impacto de la crisis en la economía doméstica. De ahí que cambien los hábitos de consumo. Este se hará más racional y con una creciente influencia de internet y de las redes sociales a la hora de buscar gangas y comparar precios.
Pese a todo, en España se sigue considerando la Navidad como una época propicia para compensar con las compras el pesimismo por la marcha de economía. Mientras el 44% considera que la situación del país empeorará --un punto menos que el año pasado-- y el 46% reconoce que tiene menos capacidad de gasto que el año pasado, el deseo de olvidar la crisis y darse un respiro por unos días es el motivo principal para gastar más.
Pero los hábitos se van moderando ya que la mayoría comprará regalos útiles o de marca blanca, en el caso del gasto para comida. Y, sobre todo, comprará obsequios para menos personas.
DESEOS Y REALIDAD Por sexto año consecutivo en España la auditora Deloitte ha rastreado las tendencias de los hábitos de consumo navideño confirmando un retroceso del derroche, una mayor búsqueda de ofertas y el casi imposible cumplimiento de los deseos en esas fechas tan propicias para la fantasía. Por ejemplo, los viajes son el segundo regalo preferido (casi ha doblado las apetencias en un año), pero a la hora de comprar serán sustituidos por los cosméticos y perfumes.
De los 655 euros de gasto navideño, 380 se emplearán en regalos (35 menos que en el 2009), 180 en comidas (35 euros menos) y 95 en salidas (10 menos). España sigue estando ligeramente por encima de la media europea (599 euros) aunque hay países que la superan ampliamente como Irlanda, con un gasto total por familia de 1.020 euros. "El consumidor español cada vez quiere más por menos", afirma la responsable para España de esta encuesta, Victoria Larroy. El estudio fue realizado en septiembre.
