La crisis de Eurobank, la primera que se recuerda de un banco desde la intervención de Banesto, ha puesto en tela de juicio la actuación del Banco de España. Así lo ven la mayoría de los 70.000 clientes de Eurobank que temen por sus ahorros, las asociaciones de usuarios, los accionistas minoritarios de la entidad y representantes políticos.

Un portavoz del Banco de España insiste en que "el Banco de España puede inspeccionar, sancionar, recomendar..., pero no puede impedir que haya empresas que vayan mal".

En los últimos años, el Banco de España, que gobierna Jaime Caruana, ha hecho múltiples requerimientos a Eurobank modificando cuentas y pidiéndole sucesivas ampliaciones de capital.

Un grupo de 49 accionistas de Eurobank, propietario del 15% del capital, aseguró ayer a Europa Press que, desde hace cuatro años, han alertado al Banco de España de posibles irregularidades.