Hay coincidencia entre los analistas económicos: la crisis hipotecaria desatada en EEUU tendrá como primera consecuencia en España el final de una etapa de dinero barato y afectará al crecimiento económico a partir del año que viene. Traducido a cifras, los economistas dan por hecho que el PIB crecerá a un ritmo más lento y el euríbor subirá al 4,7%.

Aunque no haya "efectos directos" en los bancos y constructoras españolas, tanto a ellas como a los ciudadanos les afecta un encarecimiento del precio del dinero, según explicó a la agencia Efe el director de la gestora de patrimonios de Ahorro Corporación, Josep Prats.

"Se iniciarán menos proyectos inmobiliarios a un año vista y se notará en una reducción de actividad y desempleo", dijo Prats, quien advirtió además del "alto grado de exposición" de la banca a las promotoras.

Desde el Instituto de Estudios Económicos, Manuel Colinas considera que las variables macroeconómicas de la eurozona, y en particular de España, permitirán que el "latigazo" de los mercados no tenga tanta repercusión como en EEUU. Colinas se fía del prestigio del sistema bancario español en el análisis de riesgo, que se ha mostrado cuidadoso en la concesión de préstamos, lo que minimiza la influencia de la crisis.

EURIBOR MODERADO Sobre el encarecimiento de las hipotecas, los analistas señalan que el euríbor a 12 meses --índice de referencia de los préstamos de vivienda-- no alcanzará el máximo del 5,219% (registrado en septiembre del 2000) ni el 4,80% que rozó el mercado interbancario diario el pasado jueves.