La empresa española Mango ha anunciado que abandonará Argentina por la falta de rentabilidad de sus establecimientos en este país, donde se instaló en diciembre de 1998. "La operación local nunca llegó a ser rentable y con la devaluación del peso, el negocio no marcha", justificó Isaac Andik, socio fundador de la empresa, en unas declaraciones ayer en el diario económico bonaerense El Cronista .
Andik viajó a Buenos Aires para explicar a los 65 empleados las razones por las que la empresa dejará el país. "No se justifica producir en Buenos Aires para cuatro puntos de venta --dijo-- ni tampoco hay margen para mantener los precios en dólares".
El peso argentino acumula una devaluación del 70% con el dólar estadounidense desde enero del 2002, cuando Argentina abandonó la convertibilidad entre ambas monedas que regía desde abril de 1991.
PROXIMOS CIERRES
En los próximos 10 días, Mango cerrará tres locales que tiene en otros tantos grandes centros comerciales de Buenos Aires y sus alrededores. Los estocs se venderán en la tienda que la firma posee en la calle Florida --principal paseo comercial del centro de Buenos Aires--, que será el último en cerrarse, en marzo.
El año pasado, Mango inició un plan de ajuste con el cierre de dos puntos de venta también en Argentina tras una caída de ventas del 35%.
