La incertidumbre que planea sobre la economía se ha convertido en un peso suplementario sobre los mercados. De manera que ayer los inversores prefirieron decantarse por las ventas, y van cuatro sesiones consecutiva. Así, el Ibex 35 se desprendió del 0,24% de su valor, hasta los 15.140 puntos, peor que el resto de Europa. La construcción volvió a ser el sector más castigado. Por lo demás, el petróleo no implicó cambios en el mercado, mientras que el euro bajó a los 1,434 dólares.

La información macroeconómica publicada en EEUU no sirvió para alentar las compras en los mercados. Aunque tuvieron mayor efecto los resultados del gigante de la renta fija Bear Stearns, que sufrió sus primeras pérdidas trimestrales en 81 años. La revisión del PIB no deparó sorpresas. En Europa, los principales indicadores cerraron la jornada con ganancias que van del 0,97% del FTSE de Londres al 0,26% del CAC parisino. Dentro del selectivo Eurostoxx 50, Deutsche Boerse y Eni se distinguieron con alzas del 1,6%, mientras que Vinci (-2,92%) e Intesa Sanpaolo (-2,05%) cerraron la tabla.

En el mercado español, las constructoras se desplomaron en otra sesión que fue de menos a más y en la que se negociaron más de 5.800 millones de euros. FCC perdió el 3,95%, seguida de Sacyr (-3,06%), Acciona (-2,68%) y ACS (-2,33%). Ferrovial cerró plana.

Colonial fue la excepción dentro del sector del ladrillo con una subida del 7,34%, hasta los 3,07 euros por acción, la mayor del Ibex y al calor de un gran volumen negociado por la abundancia de operaciones fuera de mercado. En el polo opuesto, Sogecable (3,58%) y su matriz, Prisa (4,6%) avanzaron con el anuncio de una opa por el 100% de la plataforma de TV digital, al precio de 27,96 euros por acción.

Fuera del selectivo, Avanzit y su filial, debutante el jueves en bolsa, Vértice 360, cayeron más del 14%. Testa Inmuebles y Aisa se dejaron más del 9%, mientras que Uralita y Montebalito cedieron el 7%.