La reforma del IRPF que ultima el Ministerio de Hacienda mantendrá prácticamente intacta la deducción por compra de vivienda, "con algunos retoques", pero dará un giro en la de alquiler.

El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Angel Fernández Ordóñez, explicó ayer que el Gobierno baraja la posibilidad de "repartir" la actual deducción por alquiler de vivienda, que ahora sólo beneficia al propietario, entre éste y el inquilino. "De paso, éste tendría un incentivo para declarar la renta que paga", lo que ayudaría a controlar mejor estos ingresos, con frecuencia ocultos. Ahora, el arrendador puede deducir hasta el 50% de la renta obtenida.

Fernández Ordóñez, que ayer participó en un foro empresarial organizado por el diario Cinco Días, explicó las líneas maestras de la próxima reforma del IRPF, que se debe tramitar en el Parlamento a lo largo del 2006 para entrar en vigor en enero del 2007. "Hemos descubierto que la vivienda en propiedad es una solución magnífica para el problema de la dependencia", dijo, por lo que su deducción se mantendrá (el 15% sobre un máximo de 9.000 euros al año), "con algún cambio técnico".

"MAXIMO DE BENEFICIOS" Además, el nuevo IRPF empleará "el máximo de beneficios" para incentivar los planes de pensiones privados de las clases medias, fomentará el rescate del ahorro en forma de renta vitalicia e incluirá un trato "superbeneficioso" para "todas las figuras ligadas a la dependencia", a la atención de los ancianos.

Así, los seguros de dependencia serán favorecidos, aunque se hará "muy lentamente". Fernández Ordóñez admitió que la llamada "hipoteca inversa" (entrega de una renta vitalicia a cambio de la vivienda) es "un acierto". No obstante, sería necesario introducir "alguna corrección" para que, en caso de muerte del propietario, no pase toda la vivienda a manos del banco o caja, sino que los herederos accedan a una parte del patrimonio.

En relación a los planes de pensiones, Hacienda baraja recortar los topes actuales de aportación, que puede llegar a 42.000 euros al año.

La tarifa del IRPF se rebajará. Habrá alguna recorte en los tipos (ahora, el mínimo es del 15% y el máximo, del 45%), al tiempo que se elevarán las cuantías a partir de las que se aplica cada porcentaje (los tramos). Para el 2006, por ejemplo, el tipo mínimo del 15% se aplica a partir de una base liquidable de 4.161,60 euros. En la reforma, el tipo mínimo (que podría quedar en el 15%) empezará a aplicarse a partir de una base más elevada.

La fiscalidad del ahorro también será reformada. Fernández Ordóñez apostó ayer por llevar toda la fiscalidad del ahorro a un tipo fijo, al margen de la tarifa progresiva del IRPF, en la línea del 15% que ahora se aplica para las rentas de capital.