La crisis y la menor recaudación han hecho que el déficit del Estado entre enero y julio fuera de 49.687 millones de euros en términos de contabilidad nacional, el 4,69% del Producto Interior Bruto (PIB), lo que supone cinco veces el saldo negativo registrado en el mismo periodo del año anterior. Según los datos del Ministerio de Economía y Hacienda, el Estado ingresó hasta julio 57.952 millones de euros, la mitad de lo que gastó, 107.639 millones de euros. En términos de caja --que computa los ingresos y pagos cuando se efectúan y no cuando se comprometen, como hace la contabilidad nacional-- el Estado alcanzó un déficit de 50.946 millones de euros, también cinco veces superior al de los siete primeros meses del 2008, en que empleó 10.553 millones. Según Economía, el déficit registrado se debe analizar como consecuencia de la coyuntura económica, pero también por el impacto de las medidas tomadas por el Gobierno para atajar la crisis, actuaciones que ascienden a más de 25.000 millones y que van desde reducciones de impuestos a medidas de fomento de empleo e inversión o aumento de las prestaciones por paro.