El mercado automovilístico español se hundió todavía más en septiembre. Los 56.595 vehículos matriculados en el mes pasado suponen un descenso del 26,9% respecto a septiembre del 2009, y sitúan el mercado en el nivel más bajo de los últimos 20 años. Los empresarios del sector, e incluso los sindicatos, han advertido de las consecuencias negativas que puede tener este descenso de las ventas en el empleo en los concesionarios y en las fábricas de coches.

Según las patronales, lo peor está por llegar. La brusca caída del 50% en los pedidos registrados en septiembre avanza "unos datos muy negativos en los próximos meses", según destacó la Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Unos 10.000 puestos de trabajo están en peligro en la red comercial, según advirtió la Asociación de Vendedores (Ganvam).

EMPRESAS El principal temor del sector es que siga agravándose el desplome del mercado, que ha pasado de un nivel que rondó el 24% en julio y agosto a casi el 27% en septiembre. Desde hace unos meses, únicamente mejoran las ventas de coches destinadas a flotas de empresas y para compañías de alquiler de vehículos. Durante el mes pasado, las empresas de renting compraron un 21% más de turismos y las de alquiler, un 69% más.

Si esos dos segmentos del mercado también se desinflan, dejarán de suavizar la fuerte caída de las compras de clientes particulares, que suponen la mayor parte del mercado, y en septiembre bajaron el 43%.

La negativa del Gobierno a prorrogar el Plan 2000E de ayudas a la sustitución de coches de particulares por las restricciones presupuestarias ha obligado a las organizaciones empresariales del sector a buscar alternativas. El presidente de Anfac, Francisco Javier García Sanz, aseguró en el Salón del Automóvil de París que se pueden barajar otro tipo de medidas de carácter fiscal o estructurales, en lugar de la subvención directa.

REUNION URGENTE Faconauto y Ganvam han pedido una reunión urgente con el Ministerio de Industria para plantear una exención temporal del impuesto de matriculación para los vehículos con una emisión máxima de dióxido de carbono de 200 gramos por kilómetro.

Esta medida supondría eliminar el impuesto de matriculación para la gran mayoría de los vehículos matriculados. En la actualidad, solo están exentos de este tributo los vehículos que no sobrepasan los 120 gramos. Con esta propuesta solo pagarían el 14,75% de impuesto de matriculación los coches más contaminantes, con una emisión superior a los 200 gramos.

Por otra parte, el presidente de Renault España, Jean Pierre Laurent, consideró ayer que en España sobran dos o tres fábricas de las cinco a 10 que peligran teniendo en cuenta el mercado. Laurent advirtió que el problema de las plantas españolas es la pérdida de las ventajas competitivas de hace 10 años por falta de flexibilidad laboral, baja productividad y costes logísticos.