Jornada negativa para las bolsas europeas que no empezaron con buen pie la negociación y fueron de mal en peor presionadas por los malos resultados empresariales y los datos macroeconómicos en EEUU. El Ibex 35 se dejó el 0,51%, si bien mantuvo el soporte de los 13.500 puntos (13.568). El euro corrigió los excesos y bajó hasta los 1,591 dólares, mientras que el Brent pulverizó su propio récord con 113,38 dólares.

Algunos valores del sector eléctrico coparon los mayores ascensos: Iberdrola Renovables fijo la cotización en 4,54 euros, después de subir el 2,25%. REE y Endesa repuntaron el 0,75% y el 0,03%, respectivamente. Las constructoras tuvieron un mal cierre, con bajadas del 1,96% para Ferrovial y del 0,15% para FCC. Sacyr Vallehermoso se dejó el 1,94%, antes de conocerse que ha vendido su participación de Eiffage a bajo precio.

Los grandes del Ibex, a excepción del Santander que repuntó el 0,6%, cedieron significativamente. Telefónica perdió el 1,69%, seguida por Repsol, que se dejó el 1,01%. Iberdrola y BBVA bajaron ambas el 0,42%.

En el mercado continuo la mayoría de cotizadas también cerraron en negativo. Aisa fue la más perjudicada, con una bajada cercana al 8%; seguida de Mecalux, que cedió el 6,9%, hasta los 22,99 euros. El título mejor cotizado de la bolsa española fue La Seda, que subió el 4,1% después de los rumores de una posible opa por parte del grupo Blackstone que finalmente fueron desmentidos.

En el resto de Europa, los pesimistas datos macroeconómicos pesaron como losas. El recuento al alza del paro americano, que subió en 17.000 personas, y la caída del índice de actividad industrial de la Reserva Federal hasta los 24,9 puntos en abril no fueron bien acogidos entre los inversores. Como consecuencia, el FTSE londinense fue el peor índice, con una bajada superior al 1%, mientras que el resto de indicadores lo hicieron por debajo del 0,5%, salvo el Eurostoxx 50, que bajó el 0,62%.