Si hay malas noticias para el Deutsche Bank, hay malas noticias para Alemania. El banco de inversión alemán, el más potente del país y uno de los más importantes del mundo, se ha desplomado esta mañana en bolsa con una caída histórica del 6,5% que sitúa ahora sus acciones en un valor de 10,69 euros, el nivel más bajo en los últimos 24 años.

Este nuevo golpe a los valores del Deutsche Bank ha arrastrado al sector bancario de toda Europa. A media mañana, el índice bursátil europeo EUROSTOXX estaba en números rojos y presentaba una caída conjunta del 1,68%. Eso ha hecho que otras instituciones financieras del continente hayan sufrido los constantes problemas del gigante alemán. Así, el italiano UniCredit se ha desplomado un 4%, el alemán Commerzbank un 3,9% y el francés Credit Agricole hasta un 2,9%. En España, el IBEX35 también ha notado esas consecuencias y ha caído un 1,76%.

El batacazo histórico del Deutsche Bank llega dos días después de que la cancillera alemana Angela Merkel asegurase en una entrevista en el semanario germánico Focus que no se planteaba el rescate de la mayor entidad financiera del país. Este 2016 el Deutsche Bank ha perdido hasta un 50% de su valor en la bolsa, unas cifras que preocupan seriamente al establishment político alemán. En su último informe el Fondo Monetario Internacional (FMI) alertó que el banco que financió el milagro de la recuperación alemana de posguerra es ahora el prestamista de mayor riesgo a nivel mundial.