Varios directivos del grupo automovilístico alemán BMW y de sus empresas suministradoras en cuatro países están implicados en un escándalo de sobornos, que investiga la justicia germana desde el 2005, según publica el semanario Der Spiegel. Un portavoz de la Fiscalía de Múnich confirmó que se ha abierto una investigación a tres ejecutivos de BMW bajo la acusación de presunto soborno.

Según la revista, el personaje central en este escándalo es un directivo de compras de BMW, que está detenido en Múnich y que supuestamente ha recibido, al menos, un millón de dólares en los últimos años de distintas empresas proveedoras de componentes como soborno para que él aprobara los pedidos de componentes para el fabricante. Las pesquisas de la justicia germana también se han extendido a otros directivos, aunque la fiscalía se negó a comentar el alcance final de las investigaciones. El responsable de compras de BMW encausado ahora se encargó en los años 90 de adquirir el equipamiento interior de la Serie 3 de BMW y más tarde del Mini, que la casa bávara produce en la planta británica de Oxford.

Altos cargos de empresas suministradoras, entre ellas la filial germana de la estadounidense Lear, también están siendo investigados por pagar elevadas cifras al gerente de compras de BMW. En el caso de Lear, este empleado de BMW recibió 278.000 dólares (230.000 euros), que fueron transferidos a una cuenta suiza, según afirmó a Der Spiegel el abogado de Lear.

DESPIDOS EN EEUU Por otra parte, Daimler Chrysler ha suspendido a seis directivos bajo la sospecha de haber efectuado sobornos en relación con el programa de la ONU Petróleo por alimentos de Irak. El escándalo está relacionado con la venta de camiones al régimen de Sadam. Para cerrar esta venta, ejecutivos de Daimler Chrysler pagaron sobornos al Gobierno iraquí, según investigaciones periodísticas.