Dos de los tres directivos del constructor Renault sospechosos de espionaje industrial tenían sendas cuentas bancarias en Liechtenstein y en Suiza, con 130.000 euros y 500.000 euros respectivamente, ingresados por una empresa china con sede en Pekín, según informa en su página web el diario Le Figaro.

La China Power Grid Corporation, "quizá un gigante de la distribución eléctrica", es la empresa que está tras esta red de espionaje, que los altos mandos de Renault investigaban de manera privada desde el pasado agosto, con la intención inicial de resolver el caso con toda discreción, asegura el rotativo.

Preguntados sobre la cuestión, los portavoces del fabricante han preferido no hacer comentarios, agrega.

VARIOS INTERMEDIARIOS

El dinero llegó a las cuentas bancarias citadas tras haber transitado por diversos intermediarios vía Shanghái y Malta, explica el diario.

Señala, asimismo, que según sus fuentes, y contrariamente a lo afirmado por el número dos de Renault, Patrick Pélata, este fin de semana, en el vespertino Le Monde, no hay aún "una visión clara del conjunto de las informaciones susceptibles de haber sido transmitidas por los supuestos espías".

Por su parte, Pekín ya ha reaccionado a las acusaciones diciendo que se trata de un acto desprovisto de todo fundamento e "irresponsable", según ha declarado un portavoz del ministerio chino de los Asuntos Exteriores.

Las acusaciones contra China son "totalmente infundadas, irresponsables e inaceptables" ha declarado al portavoz de la diplomacia china, Hong Lei, en una rueda de prensa.

FILIAL ORGANIZADA INTERNACIONAL

En Le Monde, el director general de Renault cita la existencia de una "filial organizada internacional", pero asegura estar sereno porque no se había perdido "ninguna clave tecnológica".

Aunque Pélata no alude a la pista china, Le Figaro recuerda que esta quedó confirmada en "una nota de la Dirección Central de la Información Interior fechada el 7 de enero pasado".

INVESTIGACIÓN JUDICIAL

"Por el momento solo se trata de un conjunto de sospechas convergentes que el contraespionaje francés" deberá estudiar en cuanto se le encargue oficialmente la investigación judicial, añade.

La subdirección de la protección económica de la DCRI está en alerta, aunque solo ha hecho hasta ahora "cierto número de verificaciones" a la espera de que Renault presente una querella, que ya no puede tardar, considera el diario.

Agrega que los servicios especializados de la policía se enteraron por la prensa del caso y contactaron a sus colegas de la Dirección General de la Seguridad Exterior (DGSE) que tampoco sabían nada sobre el tema.

MATERIAL INFORMÁTICO

Una filtración a la prensa hizo que tras ser seguidos durante meses, los tres supuestos espías fuesen informados de ello el pasado 3 de enero a primeras horas de la mañana, cuando al llegar a sus despachos se les comunicó que habían sido apartados de sus funciones y se les requisó su material informático.

También la semana pasada Renault se puso en contacto con el contraespionaje francés, explica Le Figaro.

NUEVOS MODELOS ELÉCTRICOS

El constructor prevé contar con dos modelos eléctricos en el mercado a mediados de este año, la berlina familiar Fluence y el utilitario Kangoo Express, y luego planea presentar el Twizy, que se fabricará en la planta española de Valladolid, y el Zoe, entre el segundo semestre del 2011 y mediados del 2012.