La compañía eléctrica Sevillana-Endesa, que controla el mercado en la provincia de Badajoz, se ha sumado en las últimas semanas al grupo de tres empresas interesadas en instalar en Extremadura centrales térmicas de ciclo combinado, instalaciones que producen electricidad utilizando el gas --en algunos casos el gasóleo-- como combustible.

El delegado regional de Endesa, Jesús Rodríguez Alvarez, ha confirmado a EL PERIODICO EXTREMADURA que la entidad está llevando a cabo los estudios previos, especialmente en la comarca de Mérida, para seleccionar posibles ubicaciones para una central. Aunque sus técnicos ya han concluido varios estudios --e incluso han contactado con la Confederación Hidrográfica del Guadiana para estudiar las tomas de agua del embalse de Alange--, Endesa reconoce que aún queda tiempo para que el proyecto cristalice y sea trasladado al Gobierno central.

Más avanzado está el proyecto de una multinacional, de origen alemán según las fuentes consultadas por este diario, que a través de una filial española presentará en el plazo aproximado de un mes la memoria de impacto medioambiental de una central de ciclo combinado que se instalaría en el término municipal de La Zarza. Según las fuentes consultadas, tendría una unidad de 400 Mw (la mitad de uno de los dos reactores de la Central de Almaraz) y se ubicaría en una zona denominada El Enclave, legalmente dentro de la Zarza pero más cerca de Alange.

OTROS PROYECTOS A estas dos iniciativas se suma la presentada en su día por International Power, que pretende construir en la zona de Mérida una central de 800 Mw, un proyecto que en su día encontró el rechazo de la Junta por situarse en una zona con protección medioambiental. El cuarto proyecto es el de Iberdrola para una central, en este caso en Alange, también de 800 Mw y que la eléctrica prevé tener en marcha en el 2009.

El director general de Ordenación Industrial, Energía y Minas de la Junta, Alfonso Perianes, reconoció ayer que el Ejecutivo ha mantenido contactos previos con al menos dos de estas empresas, aunque la Junta no tiene una postura oficial "porque es competencia del Gobierno". Perianes señaló que si Almaraz fuese clausurada en el 2010 --fecha en la que expira su actual licencia--, con una central de 800 Mw la región cubriría sus necesidades energéticas. "A partir de ahí habría que ver cómo de excedentarios queremos ser", añadió.