El ministerio de Energía ha remitido a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la propuesta para congelar el año que viene la parte regulada del recibo de la luz y del gas. Con esta medida, que afecta a alrededor del 60% del recibo, se pretenden amortiguar las alzas del resto de la factura, que en el caso eléctrico, está sujeto a las variaciones horarias en el mercado. En los últimos siete meses, el resto de la factura, que está sujeto a las variaciones horarios ha subido en torno al 28%, según ha denunciado Facua.

Con este cambio, que supone mantener los denominados peajes de acceso en el mismo nivel que este año, el devenir del resto del recibo de más de 12 millones de usuarios, los titulares de tarifa regulada o precio voluntario del pequeño consumidor (PVPC), queda totalmente en manos del mercado. Para este año, el Gobierno redujo en torno al 1% la parte regulada.

Energía, cartera al frente de la que está Álvaro Nadal, prevé que "las previsiones a futuro a puntan a una situación equilibrada que permite la contención de la parte regulada de los precios de la electricidad y del gas". En el caso eléctrico, estima un alza de la demanda que se situará en torno al 0,7%. Dentro de esta medida se incluye también la congelación de los pagos por capacidad que pagan los usuarios, que son compensaciones que perciben las compañías por mantener las instalaciones a punto de ser usadas (por ejemplo los ciclos combinados, que se paran cuando se emplean las energías renovables).

Por lo que respecta a la retribución de las instalaciones de energías renovables, así como de cogenaración y residuos, este se incrementa en unos 600 millones con respecto al 2016, según el Ministerio. Ese alza es consecuencia de la revisión de los parámetros retributivos para el periodo 2017 al 2019.

En el caso del gas se prevé un "ligero superávit gracias al mantenimiento de los peajes para el 2017",a pesar de la incertidumbre sobre la demanda al estar muy condicionada por la temperatura.

SUBIDA DEL MARGEN

Pese a esta congelación de la parte regulada, una parte sí que registrará un ligero aumento, al aprobar el Gobierno recientemente un nuevo margen de comercialización para las eléctricas que distribuyen la tarifa regulada, que son Endesa, Iberdrola, Gas Natural, EDP y Viesgo. La norma modifica otra anterior, invalidada por el Tribunal Supremo.

Esta medida supone un alza para los usuarios del 0,04% al final de año. La cuestión es que se tienen que refacturar los ejercicios 2014, 2015 y 2016, que el ministerio estima en 1,76 euros por cliente. A su vez, si se mantienen las condiciones actuales, las facturas futuras se encarecerán en unos 25 céntimos al año.

El problema de la refacturación, que resulta de la diferencia entre el margen de comercialización nuevo y anterior, se produce en los casos de aquellos clientes que en este periodo pasaron de la PVPC a un contrato en el mercado libre, que son entre dos y tres millones. En esos casos, las compañías renuncian a la refacturación. "No se puede cobrar por un servicio a alguien que ya no es cliente", afirman.