El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Joan Tard , afirmó ayer que la rebaja de cinco puntos en el impuesto de sociedades, anunciada el lunes por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, obedece al requerimiento de su grupo al Ejecutivo en la negociación de los presupuestos del Estado para el año próximo.

Tard pidió al presidente que adelante la rebaja al 2006 y le reclamó "concreción temporal" en su aplicación. En principio, la reforma no arrancará hasta el 2007.

El vicepresidente económico, Pedro Solbes, recordó ayer que la reforma "se hará de forma progresiva". La rebaja de tipos al 25% para las pymes y al 30% para las grandes empresas será gradual e irá en paralelo a la reducción de deducciones fiscales. Solbes no concretó en cuantos años se logrará la rebaja anunciada y dijo que el "horizonte razonable" al que se refirió Zapatero será "aquel que nos permita llevarla a cabo sin que se produzca una caída de ingresos y con el necesario respeto a los derechos adquiridos por las empresas".