LA MEDIDA, aplicada por el consorcio sueco de telecomunicaciones, afectará a sus 150 principales altos ejecutivos. También se congelarán los programas de opciones sobre acciones que estaban previstos. La decisión, explicó el presidente de la junta directiva, Michael Treschow, persigue acallar las críticas sobre el elevado nivel de remuneraciones de sus directivos.