España se consolidó en el 2006 como segunda potencia turística mundial --tanto en número de visitantes, por detrás de Francia; como en volumen de ingresos, por detrás de Estados Unidos-- si bien este título puede durarle pocos años más.

La Organización Mundial del Turismo (OMT), con sede en Madrid, presentó ayer el Barómetro del Turismo Mundial y su secretario general, el francés Francesco Frangialli, auguró que "no antes del 2010", China estará por delante de España en número de viajeros extranjeros y que "antes del 2020" el país asiático arrebatará el liderazgo a la primera potencia, Francia. "Cuidado con China. Se acerca pericolosamente a España", dijo el presidente de la OMT, con un desliz italiano en su alocución en castellano.

El 7% del turismo mundialEspaña recibió el año pasado 58,45 millones de turistas, el 4,5% más que el 2005 y el 7% de la cifra total mundial de 842 millones de llegadas. EEUU, el tercer país en el ránking, recibió 50,9 millones de turistas (con un incremento del 11,8%) y China, el cuarto, atrajo 49,6 millones (el 6% más que el año pasado), sin contar los 15,8 millones de Hong Kong y los 10,68 de Macao.

Con 842 millones de llegadas internacionales en todo el mundo y un crecimiento del 4,5%, el 2006, logró superar todas las expectativas, según la OMT, organismo especializado de la ONU.

"A pesar de los riesgos a los que se enfrentaba el turismo hace 12 meses, en particular el terrorismo, la preocupación sanitaria por la gripe aviaria y la subida de los precios del crudo, 2006 volvió a ser un buen año, con un crecimiento por encima de la previsión del 4,1% a largo plazo, y con el respaldo de uno de los periodos más largos de expansión económica continuada", dijo el secretario general.

Se prevé que en el 2007, el turismo volverá a crecer en torno al 4% "y se convertirá en el cuarto año de crecimiento sostenido". Según Frangialli, el sector mundial ha entrado "en una nueva fase de crecimiento, más moderado, más sólido y más responsable".

En opinión de la OMT, los precios del crudo "no suponen ya el mismo riesgo para la estabilidad económica que el año pasado". Sin embargo, persisten incertidumbres en el frente de la economía mundial que podrían afectar a las previsiones para el turismo, como la subida de los tipos de interés en algunos países o la debilidad del dólar. "Por otra parte, un euro más fuerte podría estimular los viajes internacionales de los europeos", según el organismo.

De los datos del sector turístico del 2006, Frangialli destacó el crecimiento de las cifras de Africa, que mejoraron el 8,1%, si bien todo el continente apenas representa el 4,7% del número total de viajeros en el mundo.

Lucha contra la pobreza"Este dato (de crecimiento en Africa) nos llena de satisfacción", dijo Frangialli, quien también subrayó los buenos datos de Asia Pacífico --tras el tsunami-- y de América Latina, pese a la intensidad de los huracanes.

Una de las características del 2006 han sido los buenos resultados de los países emergentes. Para la OMT "al ser uno de los sectores más dinámicos de la economía, el turismo tiene una función decisiva entre los instrumentos de lucha contra la pobreza". Desde este punto de vista --según la OMT-- el turismo puede jugar un papel importante para lograr los objetivos de "El Milenio" marcados por la ONU para reducir la pobreza a la mitad en el 2015.