El FMI considera que, dentro de la zona del euro, el crecimiento seguirá siendo robusto en España y en Grecia (gracias al impulso de los Juegos Olímpicos del 2004) como consecuencia del tirón de la demanda interna. Para España, pronostica una cierta ralentización, con un alza del 2,8% del PIB en el 2004, frente al 3,1% previsto en abril. Para el 2003 mantiene la previsión del 2,2%.

El vicepresidente primero del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, destacó ayer que, según las previsiones del FMI, el 2004 será el noveno año de expansión de la economía española. Estas estimaciones del organismo internacional demuestran, agregó, que la economía española "es capaz de crecer una década sostenidamente".