La red de cajeros automáticos de España era de 60.899 unidades a finales del 2007, con lo que se mantiene como la mayor de la eurozona, seguida de la alemana, que no llega a 58.500, según la última Memoria de la Supervisión Bancaria del Banco de España.

Los cajeros automáticos instalados por bancos, cajas y cooperativas crecieron el 5,3% en el 2007 con respecto al año anterior, según el informe, que añade que las cajas de ahorros y las oficinas de entidades extranjeras fueron las más activas a la hora de habilitar nuevos terminales, con un incremento del 7%. Parte del incremento de los cajeros automáticos --de 2.435 unidades con respecto al 2006-- estuvo asociada a la apertura de nuevas oficinas, mientras que el resto se instalaron en otros sitios.

En el extranjero también aumentaron las oficinas de entidades españolas, el 10%, hasta las 9.493, frente al descenso experimentado en el 2007.