La capacidad de España para competir con el resto de economías del mundo es actualmente menor que hace 12 meses. Según el anuario de la escuela de negocios suiza IMD, la economía española ocupa el puesto 33 en la lista de países más competitivos, tres plazas por debajo que el año pasado. El país rompe así con dos años de mejora y queda lejos de la posición 28 que ocupó en el 2004.

El informe pone a las claras las asignaturas pendientes de España: reformar "en profundidad" el mercado de trabajo, mejorar su capacidad tecnológica y el sistema educativo (particularmente la formación profesional), garantizar la eficiencia del mercado energético y reducir los impuestos a las empresas.

El estudio suspende al país en las cuatro áreas que analiza. España ha sufrido retrocesos en su situación económica (del 27 al 30), en la eficiencia del Gobierno (del 29 al 34), en la de las empresas (del 33 al 40, con lo que el sector privado queda justo por detrás del de países como Colombia, Suráfrica y Turquía), y en infraestructuras (del 29 al 30).

INVERSION El centro educativo tan solo considera que la economía española, octava del mundo por producto interior bruto, está entre las 10 primeras del mundo en un aspecto: paradójicamente, en su capacidad para atraer la inversión extranjera (novena posición). Sin embargo, ocupa posiciones muy retrasadas en aspectos como el mercado laboral (46), la gestión de los negocios (42), la actitud y valores de los empresarios (42), la legislación empresarial (38) o la política fiscal (37).

El informe reconoce algunas mejoras en el 2007, como el superávit de las cuentas públicas, la contención de la inflación o la reducción del paro. El problema es que todos estos elementos están más que amenazados por la crisis, con lo que el país puede perder aún más competitividad a lo largo de este año.

En la parte negativa, el IMD es especialmente crítico con la caída del número de patentes por habitante, las perspectivas que presenta la gestión de las cuentas públicas durante los próximos dos años, la mayor debilidad de la economía ante los cambios de ciclo, el mayor coste que el capital tiene para las empresas y la excesiva deuda de las empresas.

REZAGADA Uno de los mayores problemas para España es que está por detrás de casi todos los países de su entorno. De los grandes de Europa, solo Italia ocupa una posición más retrasada (42), mientras Francia ha logrado mejorar en un puesto (25), el Reino Unido ha cedido uno (21) y Alemania se mantiene (16).

Estados Unidos, Singapur, y Hong Kong copan el podio. El resto del top ten lo ocupan Suiza, Luxemburgo, Dinamarca, Australia, Canadá, Suecia y Holanda.

El informe sostiene además que el mundo ha entrado de lleno en la "segunda ola de la globalización" y afirma que la prioridad para los países avanzados debe ser estar presente en los emergentes debido a su incipiente clase media.